Redacción, 03-07-2014.- La recomendación clásica de comer cinco raciones diarias de frutas y hortalizas frescas es mucho más fácil y agradable en verano, cuando las mesas pueden tener un aire diferente, especial, vivo, gracias a estos alimentos que, además, no requieren mucha elaboración y pueden consumirse crudos.
La Asociación 5 al Día nos explica qué esconde cada uno de los colores de frutas y hortalizas:
– ROJO: los alimentos de color rojo deben su color a carotenos como el licopeno, sustancia antioxidante que está en estudio por su relación con la salud. las frutas rojas, como las fresas, contienen vitamina C y ácido fólico y aportan manganeso, mineral que contribuye al mantenimiento de los huesos.
– PÚRPURA: las uvas, los arándanos, ciruelas, berenjenas y cebollas chalotas presentan variedades de azules y púrpuras
– VERDE: el color verde enmascara otros amarillentos como la luteína, sustancia antioxidante a la que algunos estudios atribuyen propiedades saludables. Las espinacas por ejemplo aportan potasio, magnesio, hierro, fibra, vitaminas C, E y A, fibra y ácido fólico.
– BLANCO: al ser un color neutro no colapsa la mente con información y deja sitio para todo lo que venga detrás de él. Es útil usarlo en guarniciones, sopas o purés con esa función de hacer espacio y dejar el protagonismo al resto de los platos. Los alimentos blancos, como la cebolla, el puerro, el repollo o la coliflor, contienen vitamina B6, que ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga.
– NARANJA Y AMARILLO: el naranja es el color cítrico por excelencia, que aporta energía, juventud y vigor. El amarillo, por su luminosidad, recuerda la luz del sol e inspira positivismo y alegría.