Redacción, 18-04-2015.- El abuso reiterado de bebidas azucaradas se asocia con un mayor riesgo de desarrollar síndrome metabólico (hipertensión, glucosa alta en la sangre, colesterol y obesidad). Ahora bien, tomar una bebida azucarada, como puede ser un refresco o un zumo, puede tener repercusiones positivas para el organismo, según una nuevo estudio realizado por investigadores nortemericanos.
La investigación, publicada en ‘Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism’, señala que el consumo de bebidas endulzadas con azúcar puede suprimir las respuestas a la hormona cortisol y el estrés en el cerebro, aunque parece que no ocurre lo mismo cuando la bebidas son dietéticas y están endulzadas con aspartamo.
«Esta es la primera evidencia de que el consumo de altos niveles de azúcar, pero no de aspartamo, puede aliviar el estrés en los seres humanos –afirma uno de los autores del estudio, Kevin D. Laugero, de la Universidad de California, Davis, y el Servicio de Investigación Agrícola del Departamento de Agricultura de Estados Unidos–. La preocupación psicológica o el estrés emocional pueden desencadenar el consumo excesivo habitual de azúcar y amplificar los efectos perjudiciales del azúcar para la salud, incluyendo la obesidad».
Alrededor del 35 por ciento de los adultos y casi el 17 por ciento de los niños en todo Estados Unidos son obesos, según el informe Datos y Cifras Endocrinos de la Sociedad. Las bebidas azucaradas, como refrescos y zumos, se han vinculado a este problema. La mitad de la población de Estados Unidos consume bebidas endulzadas con azúcar cualquier día, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.