Redacción, 23-03-18. “Actualmente el 15% de los hombres son infértiles. Entre ellos, el 40% de los casos se debe a causas desconocidas; un 15% son por algún trastorno genético vinculado a un problema de fertilidad; y un 30% son pacientes con seminogramas alterados sin causa genética”, según el doctor Moisés de la Casa, responsable del laboratorio de andrología de la Clínica Ginefiv.
Según recoge ‘Ginefiv’, factores ambientales y de estilo de vida están ocasionando que aumenten los casos de fallos reproductivos por causa masculina y la detección temprana es el factor más importante para evitarlo. “Con un control periódico de la salud reproductiva del hombre se podría evitar algunos de los casos que nos encontramos en las clínicas de reproducción asistida, ya que ciertas alteraciones pueden volverse irreversibles si no se tratan a tiempo”, añade De la Casa.
La Clínica Ginefiv aporta unos consejos para mantener una calidad seminal óptima:
- No fumar. Desde hace tiempo se ha demostrado en numerosos estudios el efecto nocivo del tabaco, que afecta a casi todos los aspectos de nuestra salud, incluyendo la reproductiva.
- No excederse con el alcohol. La cantidad de alcohol consumido afecta a la calidad y cantidad del esperma, puesto que influye en la producción de testosterona, responsable de la creación de espermatozoides.
- Evitar largos baños de agua caliente. Un estudio de 2007 de un grupo de urólogos de la Universidad de California reveló que una larga exposición de los testículos al agua caliente podía influir negativamente en la producción y movilidad de los espermatozoides.
- Ciclismo sí, pero moderado. Largas horas sentado encima del sillín provocan una presión en los testículos que hacen aumentar su temperatura y con ello reducir la cantidad y calidad de los espermatozoides.
- Cuidado con la ropa ajustada. La presión de la ropa interior y exterior muy pegada a la piel aumenta su temperatura deteriorando así los espermatozoides y limitando su producción.
- No llevar el móvil en el bolsillo. Las ondas electromagnéticas emitidas por un teléfono móvil o portátil que se usa sobre nuestras piernas o se guarda cerca de los genitales masculinos reduce hasta un 8% la movilidad y la cantidad de espermatozoides vivos.
- Cuidar la alimentación. Mantener un peso saludable ayudaría a producir una cantidad adecuada de espermatozoides, ya que se ha demostrado que un hombre obeso, es decir con más de 25 puntos en su Índice de Masa Corporal, produce 9 millones de espermatozoides por mililitro menos que un hombre con un IMC por debajo de esa cifra.
- Controlar el estrés: el estrés influye tanto en el hombre como en la mujer alterando la estructura de las células. Concretamente en el caso del hombre, el estrés oxidativo produce un desequilibrio entre la producción de oxígeno celular en el semen y su degradación por los sistemas antioxidantes. Este desequilibrio condiciona la calidad de los espermatozoides y la posibilidad de fecundar.