Redacción, 15-10-2020.- El envejecimiento trae consigo cambios físicos, tanto en los hombres como en las mujeres, que pueden afectar nuestra capacidad para disfrutar de las relaciones sexuales, ya que la sexualidad implica un equilibrio entre nuestras emociones y reacciones físicas. Pero son muchas las parejas mayores que encuentran una gran satisfacción en su vida sexual, porque ahora tienen más tiempo para dedicar a su pareja y disfrutan de una intimidad más profunda con la persona que ha sido su compañera de vida.
Sin embargo, otras personas pueden preocuparse de que sus parejas ya no los encuentren atractivos o de sus propias capacidades debido a los problemas físicos o enfermedades por las que han o están pasando. Todo ello crea un estado emocional que les impide disfrutar de una sexualidad plena. Además, la jubilación y los cambios en el estilo de vida que comporta entrar en cada nueva etapa vital, puede redundar en ansiedad y dificultades sexuales, tal y como indica el National Institute on Aging.
Cómo hablar de sexo
Las últimas encuestas nacionales británicas sobre actitudes sexuales y estilos de vida determinan que la mayor fuente de problemas sexuales en cualquier tipo de relación, y a cualquier edad, es la falta de comunicación. De forma que las conversaciones claras y con una actitud compasiva sobre sexo son necesarias