Redacción, 27-11-2020.-Coincidiendo con el primer aniversario de la fusión de Bristol Myers Squibb (BMS) y Celgene a nivel global, que supuso una de las mayores operaciones financieras en la historia del sector farmacéutico, BMS ha presentado en una rueda de prensa, y de manera oficial, la nueva compañía en España.
Tal y como recoge la compañía, aunque en España siguen coexistiendo de momento las dos entidades legales (BMS y Celgene), en su conjunto la nueva compañía es la 5º farmacéutica a nivel mundial, con unas ventas globales superiores a 39,8 mil millones USD en 2019, cerca de 30.000 empleados en 50 países, y un pipeline en I+D amplio y prometedor.
Durante el encuentro virtual, Roberto Úrbez, Director General de Bristol Myers Squibb en España y Portugal; José Cabrera, Director Médico de BMS en España y Portugal; y Menchu Lavid, Directora de Corporate Affairs de la compañía en España y Portugal, han dado a conocer la estrategia, las fortalezas, los avances más significativos y los retos del futuro de esta compañía biofarmacéutica líder, cuya visión es transformar la vida de los pacientes a través de la ciencia gracias al desarrollo de medicamentos innovadores para pacientes con enfermedades graves y con altas necesidades no cubierta. Todo ello poniendo el foco en la humanización de la ciencia.
“La nueva compañía es ahora mucho más sólida y potente, contribuyendo aún más si cabe a hacer avanzar la ciencia”, ha destacado Roberto Úrbez. “Para mí, es un ejemplo de unión integradora, que aprovecha las sinergias y el potencial de dos compañías innovadoras para crear una nueva biofarmacéutica líder”.
Una nueva forma de hacer ciencia
Según ha comentado Roberto Úrbez, el propósito de la compañía es mejorar la calidad de vida y las expectativas de supervivencia de los pacientes, y se sustenta sobre las fortalezas adquiridas tras la fusión a nivel financiero, de innovación y talento.
En términos financieros, la compañía cuenta con unos sólidos resultados en ventas derivados principalmente de sus productos prioritarios.
“El tamaño adquirido por la compañía permite afrontar con solvencia un escenario de inversión y desarrollo de nuevos medicamentos para el largo plazo y responder a las necesidades de nuevos tratamientos de los pacientes”, señala Úrbez. “Y en lo que se refiere a innovación, hemos integrado en nuestro ADN, aún más si cabe, la flexibilidad, agilidad y dinamismo, características que consideramos básicas para afrontar los grandes retos en materia de salud”, ha señalado Úrbez.
Por un lado, BMS ha transformado la supervivencia global en enfermedades complejas, siendo pioneros en áreas innovadoras como la Inmuno-oncología. Por otro, como Celgene, se ha cambiado el paradigma del tratamiento en áreas con grandes necesidades médicas, como el Mieloma Múltiple. “Ahora, juntos, queremos ir un paso más allá, manteniendo nuestro compromiso inicial de transformar vidas, situando todavía más a los pacientes y a los profesionales de salud en el centro de todo lo que hacemos”, ha resaltado Úrbez.