Redacción, 13-01-2019.La bronquiolitis es una de las enfermedades más frecuentes en invierno que implica el 25% de las consultas al área de pediatría y más de un 30% de las visitas a los servicios de urgencias pediátricas.
Tal y como recoge Vithas, la bronquiolitis comienza como un catarro de vías altas y a los pocos días se nota un empeoramiento a nivel respiratorio. Los principales síntomas son la tos, dificultad al respirar, pitos y sibilancias y un aumento de la frecuencia respiratoria.
El doctor Javier Miranda, jefe de pediatría de los Hospitales Vithas Nisa Virgen del Consuelo, 9 de Octubre de Valencia y Rey Don Jaime de Castellón, asegura que “ estos virus originan resfriados, pero en lactantes y bebés, el virus progresa y puede afectar también a los pulmones”.
Para atajar la bronquiolitis lo más importante es mantener una adecuada oxigenación e hidratación del niño y seguir unas medidas preventivas por parte de todas las personas que están en contacto con el bebé.
“Para mantener una adecuada hidratación hay que administrar líquidos y ofrecer alimentación en pequeñas cantidades y frecuentemente”, afirma el especialista. “Para ayudarles se deben administrar menos cantidad de alimento, pero más frecuentemente ya que la ingestión de líquidos (agua, leche o zumos) es más importante que la de sólidos”.
Como medidas preventivas en casa, el doctor Miranda explica que «las personas que presenten una infección respiratoria deben lavarse las manos antes y después de tocar al niño o alguno de los objetos que él utiliza, evitar los besos, utilizar pañuelos de papel desechables, incluso ponerse mascarilla”.