Redacción, 28-01-2014.- El Dr. Carlos Cenjor es el Jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Fundación Jiménez Díaz (FJD) de Madrid, pionero en España tanto por número de pacientes como por la calidad de sus especialistas.
El Dr. Cenjor señala que España es uno de los países europeos en los que más automedicación existe y donde mayor consumo innecesario de antibióticos se realiza. «Esto no es bueno porque si para una cosa banal utilizamos un antibiótico, a lo mejor cuando nos haga falta tendremos resistencias», matiza.
La pérdida de audición, la otitis, los tapones de cerumen, los acúfenos y los vértigos son los problemas de oído más frecuentes entre los españoles. Hay dos tipos de otitis, explica el Jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Hospital FJD. En verano suelen ser otitis externas ligadas a los baños y aguas contaminadas, y en inviernos suelen ser otitis catarrales. En este sentido, hace hincapié en que es un error, teniendo en cuenta que la mayor parte de los catarros son virales y los antibioticos no curan al virus, mandar antibióticos para una otitis catarral que nos los precisaría. «El problema es el diagnóstico», asegura.
Hay que llegar al diagnóstico. Aunque a un niño pequeño pequeño le duela el oído no siempre se trata de una otitis. «Muchas veces se cataloga de otitis sin serlo», apunta. ¿Qué puede ocurrir? «Que llore muy fuerte y el tímpano se ponga turgente; que tenga una erupción dental y la boca esté afectada, por lo que le dolerá el oído; que tenga una amigdalitis (de la garganta) pero de ahí el dolor también se va a extender al oído. Lo más importante es que sea bien explorado y bien diagnosticado», explica el Dr. Cenjor, que en otra dirección destaca también ese «pequeño milagro» llamado implante coclear, un sistema que permite a los niños oír desde muy pequeños. Su uso se ha generalizado y se ha perfeccionado tanto en los últimos años que los especialistas creen que en un plazo no muy lejano, no habrá niños sordomudos en España.
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FJD
El Jefe de Servicio de Otorrinolaringología está encantado de los medios con los que cuenta en el Hospital Fundación Jiménez Díaz (FJD) para poder realizar su trabajo diario. Tal y como subraya, «ha habido una enorme inversión en tecnología, un crecimiento de la plantilla de médicos de un 30 por ciento en los últimos años y se han potenciado todas las técnicas novedosas y con garantías para mejorar. El hospital está volcado en el paciente, en la docencia y en la investigación».