Redacción, 14-07-2017.- Las altas temperaturas que se están produciendo estos días pueden provocar problemas de salud como calambres, deshidratación, insolación o golpes de calor. Es mayor el impacto que la ola de calor puede tener sobre las persomas de más edad o con patologías crónicas, de ahí la importancia de que sepan cómo proteger su salud frente a estas situaciones de elevadas temperaturas.
Los ciudadanos pueden saber exactamente el nivel de riesgo asociado a la temperatura que hay en ese momento en el lugar en el que se encuentran consultando la web del Ministerio de Sanidad (www.msssi.es). Estos niveles de riesgo van de 0 a 3:
- Nivel de riesgo 0 (verde), ausencia de riesgo. Se prevé que en ningún día de los siguientes cinco días consecutivos, sean superadas las máximas previstas.
- Nivel de riesgo 1 (amarillo), bajo riesgo. La previsión es de que en uno o dos días de los siguientes cinco días consecutivos sean superadas las máximas previstas.
- El nivel 2 (naranja), riesgo medio. Es en el que se prevé que tres o cuatro días de los siguientes cinco días consecutivos sean superadas las máximas previstas.
- Por último, el nivel 3 (rojo), alto riesgo, significa que se espera que se superen las temperaturas máximas previstas, para cada uno de los cinco días siguientes.
Para las personas que están dentro de ese nivel 3 o rojo es recomendable, tal y como recoge el decálogo de Sanidad con recomendaciones “Disfruta este verano con salud”, que beban agua o líquidos con frecuencia y no abusar de las bebidas con cafeína, alcohol o grandes cantidades de azúcar ya que pueden hacer perder más líquido
Algunos consejos a tener en cuenta frente a las altas temperaturas:
- Beber líquidos abundantes aunque no se sienta sed. Al menos un litro y medio salvo que su médico le haya restringido la toma de líquidos.
- Consultar al médico ante síntomas que se prolonguen más de una hora, mantener las medicinas en lugares frescos porque las altas temperaturas pueden alterar su composición y efectos.
- Hacer comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor, como ensaladas, frutas, verduras y zumos, son consejos también a tener en cuenta.
- Reducir la actividad física en las horas con más altas temperaturas, usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar, y nunca dejar a ninguna persona en un vehículo estacionado y cerrado son otras recomendaciones.
- Prestar especial atención a bebés y niños pequeños, mayores y personas con enfermedades que puedan agravarse con el calor y la deshidratación, como las patologías cardíacas.
- Mantener, en la medida de lo posible, fresca su vivienda por debajo de los 32 grados durante el día y por debajo de los 24 durante la noche. Esto es especialmente importante en aquellos hogares donde residen personas mayores de 60 años, niños o enfermos crónicos.