Laura Palomares, psicóloga y directora de Avance Psicólogos, aporta unos consejos para afrontar una crisis de ansiedad, según recoge 20 Minutos:
1. Reconocer los síntomas y entender que son una reacción del cuerpo a algo que considera “peligroso”. Esto nos ayuda a identificar problemas sin resolver, un exceso de estrés que hay que rebajar.
2. Aprender a dejarse sentir los síntomas (exposición interoceptiva), ayuda a que estos disminuyan poco a poco. Para ello, es importante concentrarse. Un buen truco es apuntarlos y leerlos de forma rápida y constante hasta que notemos que desciende. ¡Atención! si pruebas a hacer este ejercicio, tienes que asegurarte de hacerlo hasta que baje, nunca lo dejes a medias, ya que dejarías tu nivel de ansiedad estancado en ese punto.
3. Cuando tenemos una crisis de ansiedad, uno de los síntomas más molestos es el de la hiperventilación, porque el exceso de oxigeno que introducimos al respirar más agitadamente nos provoca sensación de mareo y despersonalización. Un buen truco es ralentizar la respiración, alargando las espiraciones. Un ritmo de dos segundos de inspiración y cuatro de espiración es óptimo para reducir los efectos de la hiperventilación.
4. Seguir haciendo las tareas diarias, aunque tengamos las sensaciones de la ansiedad física, con el mensaje interno de: “me permito mi ansiedad, me la dejo estar”.
5. Si los síntomas son tan fuertes que te cuesta realizar esta última pauta, concéntrate en la respiración para ralentizarla y a continuación busca un estímulo alternativo que te guste y tranquilice como; llamar a una amiga o amigo; jugar a algo entretenido y fácil que no requiera concentración; cocinar y hacer ejercicio.
6. Dirige tu atención al momento presente y a tus sentidos. Inicia este ejercicio con la autoinstrucción “me doy cuenta de…” atendiendo a los cinco sentidos. Por ejemplo, “me doy cuenta del aire que me da en la cara mientras camino, me doy cuenta de los sonidos de la calle, me doy cuenta del tacto de este árbol…”.