Redacción, 13-08-2018.-Los tratamientos contra el cáncer, como la quimioterapia y la radioterapia, tienen un fuerte impacto sobre la piel y el cabello de los pacientes, por ello muchas de ellas recurren al maquillaje para disimular las secuelas de estas terapias, como las ojeras, las rojeces y los cambios de pigmentación, según recoge ‘Correo Farmacéutico’.
En este tipo de usuarios es importante tener en cuenta que “siempre se deben escoger fórmulas que contengan el mínimo número de ingredientes y que estén basadas en el cuidado esencial de la piel, con activos fisiocompatibles, sin perfumes ni conservantes, alcohol o parabenos”, explica Isabel Carbonell, formadora de Avène (Pierre Fabre) durante un taller de maquillaje oncológico celebrado en el Instituto Oncológico Baselga, en Madrid.
La farmacéutica recuerda que la fotoprotección es el primer paso en el cuidado de la piel y que la zona del cuero cabelludo requiere del uso de cremas solares, pañuelos y gorras para evitar la radiación solar. “Si en la rutina de belleza nos tenemos que quedar con un solo producto, sería el protector solar”, insistió.
Según Carbonell hay tres aspectos básicos para el maquillaje: preparar la piel, con una limpieza previa, con la aplicación de productos para el contorno de ojos e hidratantes; utilizar protección solar con índice 50+, y escoger cosméticos hipoalergénicos y no comedogénicos para aplicarlos con movimientos suaves.
“Debemos elegir productos adecuados al tipo de piel y a la sensibilidad de cada usuaria, porque durante la enfermedad la piel está más reactiva”. Por eso, “es mejor optar por leches limpiadoras sin aclarado para la zona facial, y productos emolientes para el resto del cuerpo para evitar la tirantez y la sequedad”, sugirió Carbonell.
Estas son las claves para una piel perfecta:
- No tocar las marcas en la piel que haya hecho el médico o radiólogo. La mayoría desaparecerá por sí solas.
- Aclarar el área tratada sólo con agua templada, sin jabón ni crema limpiadora, y seca, con suaves toques, sin frotar.
- Consultar al médico si se observan cualquier signo de infección como enrojecimiento, irritación o hinchazón.
- Si el área tratada escuece o se produce una pequeña costra, procurar no rascar la zona y consultar al médico o radiólogo.
- No utilizar corrector para cubrir los enrojecimientos de la piel o las manchas oscuras durante el tratamiento. Al finalizar el mismo, la piel recuperará su color natural.
- Consultar al médico antes de aplicar una crema solar, crema hidratante, loción, perfume, desodorante o cualquier producto cosmético sobre el área tratada.
- Evitar el afeitado del área tratada hasta que la piel se haya recuperado por completo.