Redacción, 13-07-2019.-Los cambios en la rutina durante el periodo estival hacen que, en ocasiones, los buenos hábitos del cuidado bucodental que se llevan a cabo durante el resto del año se olviden. Las comidas fuera de casa, los viajes o la ingesta de alimentos propios de esta época del año, como los helados, hacen que mantener intacta la higiene oral se complique.
Manuela Escorial, odontóloga de la Dirección Asistencial de Sanitas Dental, ha elaborado un listado de los problemas bucodentales más comunes en verano y cómo prevenirlos:
- No alterar las rutinas de higiene bucodental: Lavarse los dientes después de cada comida, utilizar seda dental para eliminar restos de alimentos o enjuagarse con colutorios reforzados con flúor no son hábitos que puedan perderse en verano.
- Limitar la ingesta de bebidas alcohólicas, carbonatadas, azucaradas y ácidas: Las terrazas, los chiringuitos de la playa o los bares se frecuentan con mayor asiduidad en verano. Esto provoca que el consumo de bebidas alcohólicas o azucaradas aumente en esta época del año.
- No olvidar los tratamientos bucodentales: A pesar de estar de vacaciones, la salud bucodental no descansa. Es imprescindible continuar con el protocolo fijado para aquellos que utilizan aparatos, retenedores o férulas. De lo contrario, se corre el riesgo de que, tras un periodo de tiempo sin utilizarse, estos aparatos dejen de encajar en la boca por el movimiento de los
- Evitar el contacto continuado de los dientes con el cloro de la piscina: El cloro de las piscinas puede causar acumulaciones de sarro, sobre todo, en las personas que pasan debajo del agua más de seis horas a la semana. Esta afección se conoce como “sarro de nadador”.
- Prestar especial atención a los traumatismos dentales: En verano es habitual que las oportunidades de realizar actividades físicas se multipliquen debido, principalmente, a la cantidad de tiempo libre del que se dispone. Deportes como tenis, ciclismo, surf o piragüismo acumulan más adeptos en los meses de calor y por ello el número de traumatismos dentales aumenta exponencialmente.
- Controlar el consumo de alimentos fríos: Para evitar la aparición de sensibilidad dental, entre otros problemas, conviene controlar o moderar la ingesta de helados, batidos con hielo u otros alimentos fríos. En caso de consumirlos, conviene esperar unos minutos antes de ingerirlos para que pierdan el frío intenso del refrigerador y es recomendable evitar el contacto directo de los dientes con el producto.