Redacción, 26-03-2015.- Un tratamiento de nueva generación consigue atender pacientes con ictus isquémico, el tipo que representa el 85% de ictus, de manera más eficaz, de tal forma que reduce a la mitad la mortalidad de estos pacientes.
Así lo ha asegurado en un comunicado el Hospital de Bellvitge (Barcelona), que organiza un encuentro profesional para debatir los últimos tratamientos que se utilizan para tratar estos accidentes. Los resultados de los ensayos clínicos han demostrado que la nueva técnica reduce a la mitad la mortalidad por ictus isquémico y además el 50% de personas afectadas por este trastorno recuperan la independencia funcional. De esta manera, una vez superada la fase aguda pueden volver a hacer vida normal y valerse por sí mismas.
Hasta ahora, sólo el 15% de estos pacientes se recuperaban en las mismas condiciones. El tratamiento endovascular, también llamado trombectomía, que se ha empezado a aplicar de manera habitual desde hace un mes en el centro sanitario, permite tratar a pacientes que presentan una oclusión vascular cerebral y no han respondido a los tratamientos trombolíticos o no se les ha podido administrar por contraindicaciones.
Según el responsable de la unidad de ictus de Bellvitge, Pere Cardona, «el uso estandarizado del tratamiento endovascular mejorará el pronóstico de los pacientes con ictus isquémicos graves, ya que de esta manera se consigue una recanalización rápida y eficaz de un vaso que presenta una oclusión vascular».