Redacción, 18-02-2015.- Un equipo del laboratorio de Investigación Muscular y Función Mitocondrial del Hospital Clínico de Barcelona ha descubierto una serie de tóxicos mitocondriales capaces de atravesar la barrera de la placenta y que podrían perjudicar el desarrollo del bebé.
Para llegar a esta conclusión, publicada en ‘Journal of Environmental Research and Public Health’ y recogida por la plataforma Sinc, los expertos han revisado diez años de estudios científicos sobre toxicidad mitocondrial en embarazadas, comprobando que la exposición a agentes tóxicos, como virus, algunos fármacos, pesticidas, alcohol y tabaco, causa enfermedades en las mitocondrias de las que aún se sabe muy poco, y que se transmiten de la madre al feto.
«Son muchos los agentes que fomentan este tipo de toxicidad. Entre ellos, se encuentran agentes biológicos como algunos virus, antibióticos, fármacos antirretrovirales, fármacos antipsicóticos, gases como el monóxido de carbono, sustancias químicas como los pesticidas, el alcohol y el tabaco, entre otros», ha explicado la líder del estudio, Constanza Morén.
Además, prosigue, dependiendo del tiempo de exposición, de la dosis de cada tóxico y de la fase del embarazo en la que se reciba, la toxicidad en las embarazadas será más probable. También, existe una predisposición genética que puede determinar que la persona sea más resistente o vulnerable a esa exposición.
«En el mundo mitocondrial existen los llamados haplogrupos, que determinan la composición genética de nuestras mitocondrias. El hecho de tener un haplogrupo u otro puede condicionar la resistencia a las alteraciones mitocondriales», ha explicado Morén