Redacción, 12-03-2021.- Mantener la constancia en las revisiones oculares, sobre todo tras el parón causado por la Covid-19, es una de las principales recomendaciones que los expertos del Instituto Oftalmológico Fernandez-Vega (IOFV) hacen para el tratamiento del glaucoma, primera causa de ceguera irreversible en el mundo y que en nuestro país afecta a más de un millón de personas, con una prevalencia superior al 2,1%.
“Dado que el glaucoma es una enfermedad silenciosa, que no suele asociarse a síntomas en las primeras fases, es recomendable consultar con un especialista sin esperar a notar ninguna señal para anticiparse a su progresión. En este sentido, la detección precoz mediante revisiones oculares de forma periódica es el primer paso en el tratamiento del glaucoma, ya que de esta forma se mejora su pronóstico”, ha señalado el Dr. Ignacio Rodríguez Uña, especialista de la Unidad de Glaucoma del IOFV.
En cuanto a la creencia de que esta enfermedad únicamente se da en personas de avanzada edad, el Dr. Pedro Pablo Rodríquez Calvo, responsable de la Unidad de Glaucoma del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, ha apuntado que aunque el glaucoma más habitual, el primario de ángulo abierto, se asocia generalmente al envejecimiento y su incidencia aumenta con la edad, también puede aparecer en otras franjas de edad. Tanto es así que, en ocasiones, especialmente cuando existen antecedentes familiares, se diagnostica en personas relativamente jóvenes (40-50 años).
Sobre los tipos de glaucoma más frecuentes que suelen afectar a las personas más jóvenes, los expertos del IOFV han destacado los secundarios, que son aquéllos originados por una alteración ocular.
“El más habitual es el glaucoma pseudoexfoliativo, muy prevalente en nuestro medio. Además, podemos encontrar otros como el glaucoma por cierre angular, el pigmentario, el normotensivo, etc.”, ha enumerado el responsable de la Unidad de Glaucoma del IOFV.