Redacción, 12-01-2015.- Nieblas, heladas, mayor contaminación, cielos despejados e incluso dolores de cabeza son efectos del anticiclón de las Azores que afecta a España desde diciembre y que puede alcanzar un récord nacional en valores de presión. Los anticiclones suelen presentar su mayor periodo de actividad durante el verano, aunque «su presencia durante los meses invernales no es algo fuera de lo normal», asegura en un comunicado la web meteorológica, ElTiempo.es.
«Cuando el anticiclón llega a España y se mantiene en estas fechas, obliga a que las borrascas y frentes se desvíen hacia las islas británicas» en un desplazamiento que se conoce como «situación de bloqueo», lo que impide el desarrollo de nubosidades y mantiene el cielo despejado con vientos en calma durante varias semanas.
«La parte mala del ciclón es que su estabilidad atmosférica deja atrapados los elementos contaminantes», que se concentran a altos niveles en las ciudades. Asimismo, las altas presiones pueden provocar dolores de cabeza y en las articulaciones, ya que el cuerpo soporta «un mayor peso de las masas de aire», concretamente de entre 1045 y 1047 hectopascales (hPa)durante esta noche y mañana.