Redacción, 25-02-2014.- Dar a luz en el agua lleva siendo una alternativa al parto tradicional desde hace más de cuarenta años, pero todavía a día de hoy pocos hospitales y clínicas ofrecen la posibilidad de dar a luz de este modo.
La dilatación y el nacimiento se desarrollan en bañeras cotidianas, similares a las que se pueden tener en casa, con agua a 37 grados. Esta temperatura aumenta la segregación de endorfinas, que son los analgésicos de nuestro cuerpo, por lo que se alivia el dolor de una manera natural, informa Jacobo Pérez Vielba en las páginas de ‘Estar Bien’. Además, el agua permite una mayor relajación muscular y ablanda los tejidos como el perineo, por lo que en contadas ocasiones se hace necesaria la episiotomía o la instrumentalización del parto con fórceps o ventosas.
El agua permite asimismo contracciones más eficaces, por lo que se reduce de manera notable el periodo de dilatación. Y para los partidarios de este tipo de alumbramiento, las ventajas no acaban aquí. Tal y como señala la ginecóloga Gaia Zocchi, del equipo CumAqua,»la madre es más libre de moverse en un ambiente íntimo y esto se traduce en un mejor control de la ansiedad y el estrés generados por el parto». La intervención médica es mínima. En los hospitales y clínicas que ofrecen esta posibilidad, sólo un ginecólogo y una matrona asisten al nacimiento. El número de epidurales que se requieren es reducido, aunque si la madre lo solicita, se le aplica y se puede continuar con el parto de manera natural.
El bebé nace en el medio más parecido al que ha estado durante los 9 meses, por lo que su llegada al mundo es menos «traumática» y se genera inmediatamente un contacto piel con piel entre recién nacido y madre, se puede leer en ‘Estar Bien’. El pediatra reconoce al bebé en los brazos de su madre y se corta el cordón umbilical cuando deja de latir, igual que en un parto tradicional.
Al tratarse de una práctica relativamente novedosa, pocos hospitales ofrecen esta posibilidad en nuestro país, aunque algunos ya empiezan a introducir, al menos bañeras para la dilatación, en sus plantas de maternidad.
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¿EN QUÉ HOSPITALES SE LLEVA A CABO ESTA PRÁCTICA?
- Hospital Comarcal O Salnés, Villagarcía de Arosa, Pontevedra.
- Hospital Virxe Da Xunqueira, Cee, A Coruña.
- Hospital Comarcal D´Inca, Mallorca.
- Hospital de Poniente, el Ejido, Almería.
- Hospital Santa Catarina, Salt, Girona.
- Hospital de Poniente, el Ejido, Almería.
- Hospital Sont Llátzer, Palma de Mallorca.
- Hospital Acuario Beniarbeig, Alicante.
- Hospital Público Torrejón de Ardoz, Madrid.
- Clínica La Milagrosa, Madrid.
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SE DESACONSEJA…
La Organización Mundial de la Salud establece que la madre debe de sentirse libre en el momento del parto y elegir la opción que ella prefiera. Sin embargo, hay casos concretos en los que se desaconseja dar a luz en el agua:
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- Embarazos patológicos complicados con diabetes gestacional.
- Embarazadas con hipertensión.
- Embriones con malformaciones severas.
- Embarazos gemelares.
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Además, durante el parto es importante saber que no se puede parir en el agua si aparecen señales de sufrimiento fetal, alteraciones de monitor o sangrado vaginal.
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