Redacción, 19-12-2017.- En Navidad es una época del año en la que se comenten excesos nutricionales y se llevan hábitos se descuidan los hábitos de vida saludable. Por ejemplo, tendemos a interrumpir nuestra rutina deportiva y de actividad física, fundamental para mantener nuestro peso a raya, y también es típico que fumemos y consumamos más alcohol.
En palabras de Eduardo González Zorzano, experto del Departamento Científico de Cinfa, “durante estas fiestas, se suceden las comidas de trabajo y de amigos, así como los convites familiares. Dado que el alcohol, los dulces y los alimentos de alto contenido en grasa forman siempre parte de la ecuación, esto supone que nos adentramos en las semanas más hipercalóricas del año”.
Según indica el experto de Cinfa en estas fechas también solemos descuidar la alimentación de nuestros hijos, permitiéndoles comer más dulces o más bebidas azucaradas, entre otras cosas. “Los padres deberíamos redoblar los esfuerzos en esta época con el objetivo de afianzar los hábitos nutricionales de nuestros hijos, que de por sí ya están bastante alejados de la dieta mediterránea».