Redacción, 21-01-2019.- En España se estima que en torno a la mitad de la población padece una patología digestiva mientras que las enfermedades cardiovasculares se mantienen como la primera causa de muerte, según la Fundación Española del Aparato digestivo y la Fundación Española del Corazón.
Según un nuevo estudio de la Universidad Estatal de Pennsylvania y Juniata College, publicado en Journal of Nutrition, el consumo de nueces enriquece ciertas bacterias intestinales que se asocian con mejoras en el colesterol y la presión arterial, gracias a la combinación única de compuestos bioactivos, ácidos grasos y fibra dietética de este fruto seco.
En este nuevo ensayo se incluyó a 42 personas con sobrepeso u obesas de entre 30 y 65 años y con riesgo de padecer una enfermedad del corazón. Los participantes primero siguieron un patrón de dieta occidental durante dos semanas para asegurarse de que todos comenzaran con la misma base de referencia y posteriormente se les asignó aleatoriamente una dieta que reemplazó ciertas grasas saturadas por nueces o por una mezcla de aceite vegetal que incluía los mismos ácidos grasos que las nueces.
Los individuos que consumieron nueces y el aceite vegetal con el mismo perfil de ácidos grasos que las nueces mostraron cambios positivos en las bacterias intestinales en comparación con la dieta occidental, lo que sugiere un impacto positivo del Omega-3 AAL. Aquellos que siguieron únicamente la dieta de nueces, tuvieron un enriquecimiento único de una especie particular de bacterias – la que juega un papel importante en el metabolismo de los elagitaninos, un componente bioactivo de las nueces que puede estar asociado con beneficios cardiovasculares. Los tipos de ácidos grasos en las nueces y el aceite vegetal pueden impactar positivamente en la salud intestinal, pero este estudio también sugiere que hay beneficios al consumir una nuez entera.