Redacción, 28-07-2014.- El embarazo supone para las futuras mamás una etapa tan ilusionante como compleja en el plano corporal y psicológico. Ningún embarazo es igual, pero en mayor o menor medida siempre hay que lidiar con cambios hormonales y molestias físicas. Estas últimas, muchas veces en forma de dolor de espalda, se pueden transformar en verdaderos problemas si no se previenen.
En opinión de Ana Echeveste, quiropráctica que dirige el centro quiropráctico que lleva su nombre en San Sebastían, «el dolor de espalda es un síntoma tan común como desatendido por muchas mujeres embarazadas, que lo llegan a asumir como algo normal e inevitable del embarazo. A veces no se toma conciencia de que se puede paliar y prevenir siguiendo buenos hábitos».
Ejercicio para reducir estrés y prevenir lesiones
Muchos de los malestares y dolores musculoesqueléticos comunes asociados al embarazo, como el dolor lumbar, son resultado de lesiones por sobrecargas debido a una musculatura débil. Todo ello se puede prevenir con ejercicio sin ningún efecto negativo sobre el feto.
Ana Echeveste señala que «en el caso de las embarazadas, la práctica física siempre se debe llevar a cabo de forma suave y evitar sobreesfuerzos. Pero hay que moverse, tan negativo es el ejercicio excesivo como el sedentarismo. Se deben llevar a cabo hábitos diarios sanos y relajados, que favorecen notablemente el bienestar físico y mental de la embarazada”.