Redacción, 25-08-2019.- Las vacaciones estivales tienen como objetivo descansar y desconectar de la rutina; sin embargo, no todos consiguen hacerlo. Y es que, según algunos especialistas en psicología, cada vez son más las personas que padecen estrés durante sus vacaciones de verano, un trastorno que va en aumento, sobre todo, porque no consiguen desconectar totalmente del trabajo.
“Las vacaciones son una excelente oportunidad para sacar beneficios a nuestro cuerpo y mente, necesarias para recuperar el bienestar físico y emocional pero que, si no se saben gestionar de forma adecuada, pueden generarnos estrés y conseguir un efecto contrario al deseado”, explica Vanesa Tejón, psicóloga del Hospital Vithas Xanit Internacional de Benalmádena. “Cada vez son más las personas que padecen lo que se conoce como estrés vacacional o bajón veraniego, un síndrome que provoca ansiedad y frustración, sobre todo cuando nos habíamos creado unas expectativas muy altas de nuestras vacaciones que luego no se ajustan a la realidad”, añade la especialista.
Consejos para prevenir el estrés vacacional
Llevarse en la maleta de viaje el estrés vacacional no es recomendable y si no prevenimos o intervenimos a tiempo, este proceso puede ocasionar serios trastornos, tanto en la salud física como en la mental de la persona. Por eso, los especialistas del Hospital Vithas Xanit Internacional han preparado una serie de consejos que ayudarán, no sólo a prevenir este estrés vacacional sino también a evitar la temida depresión post-vacacional a la vuelta:
- Programa con tiempo, y de forma equilibrada, tus vacaciones: sé consciente de lo que puedes y no puedes abarcar y, sobre todo, deja tiempo también para el descanso. Realizar una planificación previa de las mismas, sobre todo si vas a salir de viaje, con planes flexibles, puede evitar el agobio que genera querer hacer mucho en poco tiempo.
- No crees expectativas difíciles de cumplir: márcate unos objetivos reales y sé consciente de los imprevistos, dejando margen para ellos por si se dieran.
- Si vas a ir de viaje, procura estar unos días antes y unos días después del mismo en casa. Esto te ayudará a organizar todo con más tranquilidad y a que las transiciones al inicio y final de las vacaciones no sean tan rotundas, pudiéndonos adaptar mejor a los nuevos ritmos.
- Intenta prescindir, por unos días, del reloj y los horarios, llevando a cabo rutinas diarias más flexibles y diferentes al resto del año.
- Realiza también una planificación económica de tu viaje: programar los gastos para que éstos no excedan de lo permitido o destinar un presupuesto previo ajustado a nuestras circunstancias económicas para nuestro viaje pueden ayudarnos a no encontrarnos sorpresas desagradables a la vuelta.
- Deja en casa todo aquello que no sea imprescindible o que te recuerde a la actividad laboral, así evitarás estar pendiente de las redes sociales, el correo electrónico, etc. Incluso puedes cambiar el estilo de ropa que lleves al trabajo.
- Intenta terminar todas las actividades pendientes antes de irte de vacaciones y, si no es posible, delega tareas.
- Recuerda llevar una vida sana durante el periodo vacacional, come bien, haz deporte, descansa de forma correcta, no duermas en exceso,…
- Si es posible, toma periodos fraccionados de vacaciones, un mes entero quizás sea demasiado tiempo pero ten en cuenta que el tiempo mínimo que necesita nuestro organismo para desconectar de la rutina es de una semana.