Redacción, 23-12-2013.- Por tercer año consecutivo suben los niveles de estrés al acercarse la época de Navidad, según demuestra el tercer estudio realizado por Nascia, entre los clientes del centro y usuarios de redes sociales.
Según se desprende del estudio, la llegada de esta época festiva intensifica los síntomas de cansancio debidos a una acumulación excesiva de actividades y de compromisos sociales y familiares. Estas causas, unidas a la falta de ejercicio o los excesos en comida y bebida hacen que la Navidad sea una época generadora de estrés y ansiedad.
Si en 2012 el 52% de los participantes manifestaban un aumento generalizado del estrés y ansiedad en los días previos a la Navidad (o en relación con los días de fiesta), en 2013 esta cifra ha aumentado hasta el 55%.
Sin embargo, este año la preocupación por la situación económica ha descendido como agente más influyente a la hora de sufrir estrés, aunque sigue manteniéndose en primera posición con un 73%, por debajo del 78% del año pasado. En este sentido, el estrés que genera el exceso en los gastos se reduce al 64% (69% en 2012), las compras también bajan al 55% (61% en 2012) y los compromisos sociales caen una décima y se sitúan en el 50%. El cansancio general y la saturación de los mensajes navideños también se mantienen en porcentajes parecidos a los del año pasado, un 48% (51% en 2012). Otras causas que aparecen en este tercer estudio sobre el estrés en Navidad son la realización de algún viaje y conciliar las vacaciones de los hijos.
Este año el estudio refleja el mayor porcentaje entre mujeres que manifiesta sufrir estrés y ansiedad en Navidad. El porcentaje de mujeres que considera esta época del año como especialmente estresante duplica al de hombres. La causa que más señalan es la mayor responsabilidad y dedicación de los preparativos y la necesidad de dedicarle gran parte de su tiempo, aunque no tengan vacaciones.
No en vano, los datos del Instituto Nacional de Estadística reflejan que siete de cada diez consumidores de psicofármacos de tipo ansiolítico son mujeres.
Como novedad para este año, se han analizado los síntomas concretos de estrés que sufren los participantes en este tercer estudio de Nascia durante la época de Navidad.
Entre los síntomas de tipo fisiológico detectados figuran el insomnio (65%), dolores de cabeza (45%), dolores musculares (76%) o trastornos gastrointestinales, principalmente dolores de estómago (53%)
Entre los aspectos cognitivos relacionados con las actitudes o pensamientos, se observa una preeminencia de los relacionados con el exceso de pensamientos negativos o recurrentes (80%), la excesiva irritabilidad (79%) o la sensación de falta de control (77%).
Todos estos síntomas, aunque acentuados por las fechas, son los habituales entre los pacientes que sufren algún tipo de alteración por estrés o ansiedad.
Así, de los datos obtenidos de las mediciones psicofisiológicas realizadas en las evaluaciones iniciales a los clientes de Nascia, el 89% refleja una respiración deficiente, bien por hiperventilación o por patrón irregular. En el primer caso, la respiración es constante pero a un ritmo superior al saludable, hasta más de 24 veces por minuto, cuando el ritmo óptimo y saludable está entre 6 y 10 respiraciones por minuto en reposo para los adultos. En cuanto al patrón irregular, se refiere a la existencia de numerosas respiraciones cortas unidas a otras más profundas, desequilibrios entre inhalación y exhalación, etc. Estos trastornos en la respiración generan a largo plazo cuadros de fatiga crónica, taquicardias, sensación de ahogo, ansiedad, etc.
El 66% de los clientes presenta una tensión muscular general excesiva. Esto provoca dolores de cabeza, bruxismo (rechinar de dientes), mayor propensión a lesiones, dolores musculares generalizados, etc.
Los expertos de Nascia aconsejan evitar los estados de estrés y ansiedad que se generan en Navidad con la práctica de ejercicio, mantener un ánimo conciliador en los encuentros con familiares y amigos y, por último, no crearse expectativas imposibles de cara al nuevo año.