Redacción, 30-07-2014.- La llegada del verano trae consigo también la guerra por el control del termostato en la oficina. El ambiente excesivamente frío en la oficina y el contraste con la temperatura exterior causan alrededor del 20% de los resfriados que se padecen durante todo el año.
Así lo destaca Unipresalud (www.unipresalud.com), compañía especializada en la gestión de la seguridad y la salud de los trabajadores y la integración de la prevención de riesgos laborales en la organización de las empresas.
El mal uso del aire acondicionado también es el causante de la mayoría de infecciones respiratorias, resfriados, irritaciones en los ojos y la piel, lumbalgias, afonías y faringitis durante los meses más calurosos del año.
Además del frío, otro factor que repercute en la salud es la calidad del aire. El funcionamiento y la recirculación del aire acondicionado provocan la absorción de la humedad en las diferentes estancias, y pueden llegar a resecar el ambiente por debajo del 30%.
Si esta situación se da de forma continuada, se pueden resecar las mucosas de la nariz y otra vías aéreas al tratarse de un aire más seco, haciéndolas más vulnerables a una infección: rinitis, faringitis, laringitis, bronquitis, neumonías (en casos más severos), dermatitis, sequedad e irritación en los ojos (especialmente en quienes usan lentillas) o dolores de cabeza.