Redacción, 19-01-2016 .- Dejar de fumar aumenta la productividad laboral en un 4,5%, según el estudio ‘Costes derivados del uso de servicios sanitarios y bajas laborales en pacientes fumadores: estudio en una comunidad urbana tal y como recoge Médicos y Pacientes.
En este estudio ha participado la doctora Isabel Nerín, neumóloga y miembro del Área de Tabaquismo de la SEPAR y aseguró, que «en pacientes exfumadores, tras el primer año después de dejar de fumar se ha comprobado un aumento de la productividad laboral de un 4,5%, respecto a los trabajadores que continúan fumando. Dicha productividad crece con el tiempo hacia valores observados en trabajadores no fumadores». Además también señaló que ser fumador incrementa más del doble la probabilidad de ser una persona de elevado coste sanitario y que los pacientes fumadores presentan una media de 11 días de incapacidad laboral, frente a los siete de los pacientes no fumadores.»Nuestro estudio muestra que el coste sanitario anual en fumadores es de 848,64 euros, y de 474,71 euros en no fumadores, lo que supone un sobrecoste del 44%», subrayó la neumóloga.
El estudio también recoge el sobrecoste generado por los pacientes fumadores que está directamente relacionado con la mayor utilización de los servicios sanitarios evaluados y el mayor consumo de fármacos de uso crónico, así como el incremento de los días de baja laboral por incapacidad temporal.
Con estos estudios se demuestra que los pacientes exfumadores de menos de tres años suponen un 46% más de gasto de hospitalización. Los de 3-15 años un 22% y a partir de los 15 años el coste es similar a los que nunca han fumado.
En relación a los costes indirectos, hay una evidencia consistente de que el tabaquismo incrementa tanto el riesgo como la duración del absentismo laboral. Además se revela que el coste anual por incapacidad temporal y pérdida de productividad es de 2.253,90 euros en fumadores y de 1.434,90 euros en no fumadores, lo que supone una pérdida 819,60 euros por fumadores.
La prevalencia del tabaquismo en España es del 24% entre mayores de 15 años, según los datos publicados. Sin embargo, el consumo de cigarrillos también produce serias consecuencias en las personas no fumadoras que inhalan pasivamente el humo. Aunque son difíciles de estimar en términos económicos, pueden incrementar los costes del tabaquismo hasta en un 15%, en función de las medidas reguladoras establecidas en cada país.