Redacción, 22-05-2015.- El enfermero Roberto Martín Serrano, del Consejo General de Enfermería de España, interviene en este vídeoblog para aclararnos cómo se toma la temperatura corporal o qué tipos de termómetros digitales se utilizan y dónde se colocan para que el resultado de la medición determine con exactitud el nivel de la fiebre de un paciente, ya sea recién nacido o un adulto centenario.
El personal sanitario mide la temperatura de los enfermos con «dos modelos de termómetros electrónicos igual de fiables e inofensivos (digitales y por infrarrojos) -afirma-, debido a que están en desuso y desaconsejados los termómetros de vidrio con mercurio.
«Este tipo de termómetros pueden causar heridas si se parten y, además, lo que podría ser peor, os pueden envenenar si el mercurio se absorbe en vuestro cuerpo», advierte Roberto.
Los termómetros digitales convierten en números las pequeñas variaciones de tensión obtenidas del paciente durante la toma de la temperatura. Emiten un aviso al completar el proceso, pasados unos minutos, y son de fácil lectura.
Los termómetros por infrarrojos son instantáneos, ofrecen la temperatura en apenas un segundo.
¿Y cómo se mide la temperatura del paciente?
Si el paciente es un bebé o un niño muy pequeño, el método más aconsejable es a través del recto, ya que es más complicado tomar la temperatura en la boca o en la axila. Antes de lubricar con vaselina el termómetro o el ‘culete’, se tranquiliza al nene.
«Colocamos al bebé sobre nuestro regazo e introducimos la sonda, o parte más estrecha, por el ano… solo uno o dos centímetros. Entonces se sujeta el termómetro con delicadeza y esperamos a que se escuche el soniquete ‘pi, pi, pi’ para retirarlo. En ese momento leeremos la temperatura en la pantalla digital del termómetro», cuenta.