Redacción, 02-07-2020.- La otalgia es el dolor intenso en el oído y el síntoma más frecuente de la otitis externa difusa del verano, también conocida como “otitis del nadador”. Cualquier desequilibrio en la flora cutánea del conducto auditivo externo puede originar una infección que de no ser tratada correctamente puede extenderse a territorios vecinos y complicarse.
La disminución de la audición y la supuración suelen acompañar al oído que duele.
Tal y como recoge Vithas, la otitis del nadador es la patología otorrinolaringológica más habitual durante la época estival ya que pasamos mucho tiempo con la cabeza sumergida en el agua (no siempre limpia) de playas, ríos y sobre todo piscinas; además, el calor, la humedad y el resto de líquido que queda en el oído tras el baño son el caldo de cultivo perfecto para que determinadas bacterias y en ocasiones hongos produzcan infecciones.
Según la Asociación de Pediatría Española (APE) entre un 80 y un 90% de niños ha sufrido algún caso de otitis durante su infancia, “sin embargo, -afirma el Dr. Lucas Fito, otorrino del hospital Vithas Valencia Consuelo, los adultos con escaso cerumen, los que padecen problemas de la piel o quienes tienen conductos estrechos son también muy propensos a padecer esta patología. A esto se debe añadir que, aunque las otitis externas son más frecuentes adquirirlas en piscinas que en agua salada, depende mucho del estado del oído de cada persona el sufrir de otitis”.
Generalmente, cuando se examina una otitis externa aparece el típico signo del trago. “En ocasiones comienza con pinchazos esporádicos y otras es muy intenso y continuo”, comenta el especialista y agrega, “el trago es la protuberancia de cartílago que existe por delante de la entrada del conducto auditivo externo, si presionamos sobre ella o si tiramos la oreja hacia atrás el dolor se intensifica”.