Redacción, 08-04-2015.- Algunas personas parecen nacidas para correr maratones y les resulta más fácil ir durante kilómetros sin cansarse mientras otros tienen un don para memorizar cosas, desde las tablas de multiplicar hasta hechos triviales. Estas dos habilidades, correr y memorizar, no son tan diferentes como parece. Científicos del Instituto Salk, en La Jolla, California, Estados Unidos, y colaboradores han descubierto que las actividades físicas y mentales se basan en una sola proteína metabólica que controla el flujo de sangre y nutrientes a través del cuerpo, como se informa en la revista ‘Cell Metabolism’.
El nuevo estudio podría apuntar a posibles tratamientos de la medicina regenerativa y de desarrollo, así como formas de abordar los defectos de aprendizaje y memoria. «Se trata de conseguir la energía donde se necesita de las centrales eléctricas en el cuerpo», señala el autor principal del nuevo estudio, Ronald Evans, director del Laboratorio de Expresión Genética de Salk. «El corazón y los músculos necesitan una oleada de energía para realizar ejercicio y las neuronas necesitan una oleada de energía para formar nuevos recuerdos», detalla. Estos expertos descubrieron que la energía para los músculos y el cerebro es controlada por una sola proteína llamada receptor gamma relacionada con el estrógeno (ERRy).
El grupo de investigación de Evans ha estudiado previamente el papel de ERRy en el corazón y los músculos esqueléticos. En 2011, descubrió que promover la actividad ERRy en el músculo de ratones sedentarios aumenta el suministro de sangre a los músculos y duplica su capacidad de funcionamiento. ERRy, como demostraron, enciende toda una serie de genes musculares que convierten la grasa en energía.
Por lo tanto, ERRy se hizo conocido como un interruptor metabólico maestro que activa los músculos para mejorar el rendimiento. Aunque los estudios también han demostrado que ERRy estaba activo en el cerebro, los investigadores no entienden por qué, ya que el cerebro quema azúcar y se había demostrado previamente que ERRy sólo quema grasa, por lo que decidieron investigar más de cerca qué hace la proteína en las células cerebrales.
Analizando por primera vez neuronas aisladas, Liming Pei, líder y coautor del artículo, encontró que, como en el músculo, ERRy activa docenas de genes metabólicos en las células cerebrales. Inesperadamente, esta activación se relaciona con el azúcar en lugar de la grasa. Las neuronas que carecían de ERRy no podía aumentar la producción de energía y, por lo tanto, actuaban de forma comprometida. «Asumimos que ERRy hizo lo mismo en todo el cuerpo -dice Evans-. Pero nos enteramos de que es diferente en el cerebro». Ahora, estos científicos concluyen que ERRy activa vías de quema de grasa en los músculos y vías de quema de azúcar en el cerebro.