Redacción, 04-04-2021.- La electroósmosis es un fenómeno que genera un movimiento en las moléculas del agua inducido por un campo eléctrico en un medio poroso, como puede ser un muro o una pared. La teoría que hay detrás de esta técnica es que, al igualar la carga eléctrica, los elementos repelerán. De esta manera, el agua del interior del muro o del suelo será expulsada.
Se basa en una teoría que no es cierta
Tal y como recoge Murprotec, aunque quienes te vendan este tipo de técnicas te expliquen de una manera razonable el efecto del movimiento de las moléculas, en realidad no funciona. La realidad es que los empujes de agua tienen una fuerza mucho mayor que la que se tiene a nivel intramolecular por esta polaridad. Es decir, que por mucho esfuerzo que se realice, la realidad es que las humedades no saldrán de la pared o del techo.
Es un tratamiento obsoleto
Hay algo que es cierto, durante el pasado este procedimiento gozó de mucha fama. Sin embargo, en la actualidad ya no se realiza. El motivo es que la innovación en el tratamiento de humedades ha encontrado fórmulas mucho más efectivas y ha hecho a los expertos decantarse por ellas. En cuanto se encontraron otras metodologías que dieron resultados, esta fue descartada por los mayores expertos.
Solo se recomienda para los problemas de humedad por capilaridad
En el único caso en el que este tipo de fórmulas podrían ocasionar algunos resultados sería en el escenario de las humedades por capilaridad. Si aplicas este remedio a humedades por infiltración o por condensación, la electroósmosis es completamente inútil.
Ninguna de sus variedades es efectiva
Existen dos tipos de electroósmosis contra humedades: la activa y la pasiva.
En el caso de la electroósmosis pasiva se instalaba un electrodo continuo en las paredes y se conectaba al suelo por unas varillas. Por su parte, en el caso de la electroósmosis activa, se aplicaba un potencial entre la barrera de estanqueidad y el suelo. Si mantenías el mecanismo activo, se podía conseguir una pequeña mejoría en la situación. Sin embargo, cuando se desconectaba los efectos volvían con mucha más virulencia.