Redacción, 24-02-2014.- Sergio Alonso publica en las páginas del suplemento ‘A Tu Salud’ de La Razón (Nº 502) un interesante artículo sobre «la importancia estratégica de la industria» que a continuación reproducimos por su interés:
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La industria farmacéutica ha caminado siempre en España en tierra de nadie. Tradicionalmente se ha enmarcado en el sector salud y en la órbita del Ministerio del ramo porque, a la postre, sus productos salvan vidas y la regulación de la política farmacéutica ha recaído siempre en ese departamento. Sin embargo, en los últimos diez años, y especialmente al calor de la crisis, la mayoría de las decisiones que más han influido en las compañías ha procedido de áreas económicas del Gobierno o de las autonomías. Sea como fuere, lo cierto es que esta desafección a un lugar concreto ha podido mermar la consideración de los laboratorios por parte de las instancias oficiales. No es de extrañar por ello que haya voces como al de Juan Iranzo, el decano del Colegio de Economistas de Madrid, que resalten el valor estratégico de las empresas que operan en el país y su incidencia en la parcela económica del país.
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«Los laboratorios han caminado siempre en tierra de nadie, lo que ha restado peso a su rol vital en la economía»
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En su último informe sobre el sector, Iranzo recuerda que éste es fuente de mano de obra cualificada, su elevada productividad laboral y su importante participación en la I+D. Víctima de la obligatoria necesidad de reducir el déficit, la industria farmacéutica ha sufrido sin embargo una drástica caída de los beneficios y de la inversión que puede dejar huérfana a España de un modelo productivo basado en el conocimiento y alternativo al «ladrillo».
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