Redacción, 08-04-2016.- Pediatras han advertido de las consecuencias negativas de puede tener un mal uso de antibióticos en niños. Según afirma el Jefe de Pediatría del Hospital Quironsalud Campo de Gibraltar y Marbella, Jose Luis Rodríguez, «si usamos mal los antibióticos y los administramos cuando no hacen falta, los gérmenes que viven con nosotros desarrollan resistencias contra él y aprenden a defenderse y a sobrevivir a pesar suyo. Y añade, «el día de mañana, cuando ese germen aparezca y produzca una infección real, el medicamento no servirá para nada y, aunque se siguen desarrollando nuevos antibióticos, no todos se pueden usar en pediatría”.
La mayoría de las veces los catarros y las fiebres que presentan los niños, que están bien vacunados, son producidas por virus, frente a los cuales los antibióticos no tienen ninguna utilidad. El tratamiento en estos casos es la hidratación y los antitérmicos, según el cuadro, y vigilar la evolución del menor. De cualquier forma, siempre hay que estar atentos ante un niño con fiebre persistente y/o mal estado general, porque lo que en principio parece un cuadro viral puede ser finalmente el periodo incubatorio de una infección bacteriana que sí requiera otros tratamientos.