Redacción, 16-01-2015.- Investigadores del grupo de Fisiología y Fisiopatología Digestiva del Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR) han demostrado que la distensión abdominal puede evitarse corrigiendo la respiración y la postura, porque que está causada por una serie de movimientos musculares voluntarios.
El hallazgo, publicado en Gastroenterology, cierra la última fase de 15 años de investigación que han sido necesarios para demostrar que detrás de la hinchazón del vientre «no están ni los gases, ni el contenido del abdomen», ha informado este jueves el VHIR en un comunicado. Para llevar a cabo investigación, el equipo del VHIR realizó un estudio prospectivo en 45 pacientes con enfermedades funcionales intestinales y episodios de distensión abdominal: todos acudieron al hospital en momentos con hinchazón y momentos sin ningún síntoma.
«Después de hacer un TAC abdominal y una electromiografía para comprobar la actividad muscular, vimos que los pacientes desencadenan una maniobra que empieza con un hinchazón del tórax y conduce a una bajada del diafragma y una protusión de la pared abdominal anterior», ha explicado el líder de los investigadores, Fernando Azpiroz.