Redacción, 09-07-2014.- La obesidad mórbida, la de un índice de masa corporal (IMC) superior a 40 kg/m2, está vinculada a tasas más altas de mortalidad, según revela un estudio publicado esta semana en ‘Plos Medicine’. Cari Kitahara y sus colegas del Instituto Nacional del Cáncer, en Estados Unidos, encontraron que las tasas de mortalidad de un amplio rango de enfermedades, especialmente las enfermedades del corazón, el cáncer y la diabetes, fueron más elevadas en los individuos con obesidad mórbida en comparación con aquellos en el rango de peso normal.
Los investigadores llegaron a estas conclusiones poniendo en común los datos de 20 estudios prospectivos de cohorte, principalmente de Estados Unidos, del Consorcio de Cohorte del Instituto Nacional del Cáncer estadounidense.
Entre los participantes con este tipo de obesidad, las tasas de mortalidad (muertes por cada 100.000 personas por año) durante el periodo de estudio de 30 años fueron 856 y 663 para los hombres y las mujeres, respectivamente, frente a las tasas de mortalidad de los hombres y las mujeres de peso normal, que fueron 346 y 280, respectivamente.
La enfermedad cardiaca es el principal contribuyente a la tasa de mortalidad más alta entre los individuos con obesidad extrema, seguida por el cáncer y la diabetes. Por otra parte, el riesgo de muerte por cualquier causa y fallecimiento por enfermedad del corazón, cáncer, diabetes y otras patologías aumenta con el incremento del IMC. En comparación con los que tienen un peso normal, un IMC entre 40 y 59 kg/m2 se traduce en una pérdida estimada de 6,5 a 13,7 años de vida.