Redacción, 27-05-2015.- El potencial de la fibra para reducir el riesgo de algunas enfermedades crónicas es de sobra conocido, sobre todo en el caso de las enfermedades cardiacas, el derrame cerebral o varios tipos de cáncer.
Ahora, los investigadores estudian su papel en la diabetes, ya que trabajos científicos anteriores apuntaban a que un consumo diario de fibra podría reducir su riesgo.
Se estima que más de 360 millones de personas en todo el mundo están afectados por la diabetes y se prevé que este número aumente a más de 550 millones en 2030, con graves consecuencias para la salud y la economía de países desarrollados y en desarrollo.