Redacción, 17-01-18.- El estudio más extenso realizado hasta ahora en España para determinar las consecuencias de la obesidad, una investigación en la que han participado 55.000 personas escogidas entre la población general, coordinada desde el Hospital del Mar (Barcelona), ha detectado que el exceso extremo de grasa abdominal que caracteriza a la persona obesa implica, en sí mismo, un elevado riesgo de sufrir cáncer o una patología cardiovascular.
Según recoge el ‘Periódico de Cataluña’, la amenaza es significativamente más grave para las mujeres. El trabajo se ha publicado en la revista científica Preventive Medicine.
Una mujer obesa tiene 12 veces más de posibilidades de sufrir un cáncer que la que mantiene un peso considerado normal, frente al doble de riesgo de padecer un tumor maligno que recae en un hombre obeso, indican las conclusiones de la investigación. Las mujeres con obesidad, además, tienen un riesgo cinco veces superior a las de peso normalizado de sufrir una enfermedad cardiovascular.
Los participantes en el estudio, de 35 a 80 años de edad, fueron evaluados durante 10 años por especialistas de asistencia primaria, que trasladaron sus datos al Institut Hospital del Mar d’Investigacions Mèdiques (IMIM). Al finalizar el estudio, habían fallecido 556 personas de peso normalizado, 1.144 que tenían sobrepeso y 753 obesas.
Para poder precisar que esos fallecimientos no eran consecuencia de las enfermedades para las que la obesidad se considera un factor de riesgo, el grupo de epidemiología y genética cardiovascular del IMIM aplicó técnicas de cuantificación informática que descartaron dichos factores. «De esa forma, hemos podido demostrar que la obesidad es, en sí misma, un riesgo de muerte por cáncer o patología cardiovascular, y no una consecuencia de sufrir otras enfermedades», afirma el doctor Albert Goday, responsable de endocrinología en el Mar y coautor del estudio.