Redacción, 20-09-2014.- La toxina botulínica tipo A de Allergan celebra diez años como tratamiento estético no quirúrgico. A la cabeza en el campo de la innovación de las toxinas botulínicas, la toxina botulínica tipo A de Allergan utilizada hasta ahora en más de 2.5 millones de tratamientos[1], está avalada por datos de eficacia y seguridad obtenidos a lo largo de más de doce años de experiencia. La toxina tipo A de Allergan puede tratar simultáneamente las patas de gallo y las líneas glabelares, indicación aprobada por numerosas agencias europeas, incluida la española, y la FDA.
La piel del contorno de los ojos posee características únicas que hacen de esta zona la primera donde aparecen signos de envejecimiento del rostro. Según el reciente estudio “Eye for beauty”* realizado por Allergan en 2014, entre más de 2.843 mujeres y hombres, las mujeres no quieren parecer “más jóvenes” cuando buscan un tratamiento anti envejecimiento. El estudio muestra que 1 de cada 5 mujeres en Europa busca tratamientos anti envejecimiento para tener un aspecto “renovado” y para “aumentar su confianza y autoestima”.
“Eye for Beauty”* muestra que las principales preocupaciones de las mujeres españolas son las ojeras (49%), la mirada cansada (37%), y las patas de gallo (28%). Una de cada dos mujeres no se siente bien con el aspecto que muestra la zona que rodea a sus ojos. La Dra. Cristina Villanueva, cirujano plástico y directora médica del Centro Cristina Villanueva de Barcelona afirma que: “en la actualidad existen tratamientos que permiten revitalizar la mirada, darle un aspecto fresco y renovado, reduciendo al mínimo los efectos secundarios y logrando resultados naturales”.