Redacción, 18-06-2014.- Investigadores de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología han vuelto a demostrar el potencial del cribado del cáncer de mama mediante mamografías ya que, según los resultados publicados en el ‘British Medical Journal’ (BMJ), estas pruebas pueden reducir hasta un 28 por ciento la mortalidad de estos tumores.
Diversos estudios previos han demostrado la importancia de las estas técnicas pero en ocasiones han planteado dudas sobre la validez de estos hallazgos. De hecho, un trabajo publicado hace meses en esta misma revista científica puso en duda su conveniencia y en un editorial adicional en este número asegura que los datos «confirman lo que ya se sabía: que los beneficios del cribado son modestos».
En este caso, el estudio incluyó dos cohortes de mujeres noruegas que fueron seguidas entre 1986 y 2009, periodo durante el que se comenzó a implantar progresivamente un programa nacional de cribado para realizar mamografías cada dos años a las mujeres de entre 50 y 69 años.
Los autores compararon las muertes por cáncer de mama entre las mujeres que fueron invitadas a someterse a una mamografía como parte de dicho programa nacional y las que no, e hicieron una clara distinción entre los casos de cáncer de mama diagnosticados antes y después del primer cribado.
También utilizaron un modelo de simulación para estimar el número de mujeres que tendrían que haber sido invitado a estas revisiones bianuales.
De este modo, en la cohorte de mujeres que participaron en el programa de cribado se registraron 1.175 muertes por cáncer de mama, frente a las 8.996 del grupo de mujeres que no se sometieron a estas pruebas.