Redacción, 30-01-2015.- La queratosis actínica (QA) o manchas solares deben interpretarse como un indicador de que un paciente tiene un «alto riesgo» de desarrollar cáncer de piel. Se trata de una enfermedad dermatológica en la que aparecen lesiones rosadas, ásperas y escamosas causadas por la acumulación de la radiación ultravioleta a lo largo de la vida. Estos datos se desprenden de un estudio epidemiológico realizado en España entre cerca de 4.000 pacientes atendidos de forma consecutiva en consultas hospitalarias generales de dermatología de ámbito nacional.
En el informe, realizado por la compañía farmacéutica Almirall, han participado expertos de la Universidad Autónoma de Barcelona y del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol de Badalona. La principal causa de la QA, una lesión precancerosa, es una exposición excesiva al sol y de forma prolongada debida a actividades al aire libre.
Según los datos del estudio, la edad media del diagnóstico es 74,3 años y su presencia es mayor en hombres (59,5 %) que en mujeres (40,5 %). La mayor parte de los pacientes presentan lesiones múltiples y varias zonas afectadas, siendo la cara el área más afectada en gran parte de los casos. El número de lesiones y zonas afectadas aumenta a medida que se incrementa la edad de los pacientes.