Redacción, 22-04-2020.- Debido a la situación de confinamiento que vivimos en España, se ha producido una reducción en la asistencia física a las consultas por parte de los pacientes.
Por este motivo, tal y como recoge Portalfarma, teniendo en cuenta que muchos de ellos siguen precisando de la prescripción de determinados medicamentos para el tratamiento de sus patologías, los Consejos Generales de Dentistas, Farmacéuticos, Médicos y Podólogos han extendido el Sistema de validación de la receta privada en papel en todo el territorio nacional.
Este sistema ofrece al paciente la posibilidad de recibir esta receta a través del prescriptor sin acudir a la consulta, por alguna vía que le permita disponer de la imagen de la misma (e-mail o Whatsapp).
Una vez obtenida la imagen, el paciente o su cuidador podrá dirigirse a la farmacia a retirar la medicación prescrita (es responsabilidad de dicho paciente o cuidador la custodia y utilización de la información remitida por el prescriptor) y se la entregará al farmacéutico impresa o permitiéndole el acceso a la imagen por la vía recibida.
De esta manera, el farmacéutico validará el código de la receta y dispensará el medicamento, quedando anulada la receta. Finalmente, el farmacéutico guardará y custodiará esta impresión o imagen por el tiempo establecido en la legislación como comprobante de la dispensación realizada.
Para la adecuada seguridad, el Sistema registrará qué farmacia ha realizado la dispensación del código de la receta en cuestión.
La ampliación por el COVID-19 del sistema de validación de la receta privada papel presenta dos características fundamentalmente. En primer lugar, si el paciente recibe de forma telemática una imagen de la receta privada emitida en los talonarios de las organizaciones colegiales de las profesiones prescriptoras, que incluye un código de barras único o Código de Verificación Electrónico (CVE), en todas las farmacias de España se podrán leer y verificar.
La segunda, es la posibilidad de, además de validar y verificar la autenticidad de dichas recetas privadas, a través de la plataforma tecnológica de la Organización Farmacéutica Colegial, Nodofarma, permitir a los farmacéuticos marcarla como dispensada, impidiendo que con dicha imagen se pueda obtener el mismo medicamento en otras farmacias, lo que supone un elemento de seguridad para profesionales y pacientes.