Redacción, 05-10-2018.- El 32% de la población en España puede acceder a un programa de intervención temprana en psicosis. Este dato es una de las conclusiones del Primer Libro Blanco de la intervención temprana en psicosis en España, que se ha presentado recientemente en la Asociación de la Prensa de Madrid con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que tendrá lugar el próximo día 10 de octubre.
Según recoge la farmacéutica Lundbeck, este documento es el primero en España que permite conocer, caracterizar y difundir los programas de intervención temprana en psicosis que se están llevando a cabo en nuestro país, analizados tanto a nivel cuantitativo como cualitativo.
La iniciativa está impulsada por el Movimiento REthinking (un proyecto multidisciplinar que tiene por objetivo replantear y mejorar el abordaje de la esquizofrenia/psicosis) en colaboración con la Alianza Otsuka-Lundbeck, y ha contado con la participación de 47 expertos en la materia y representantes de las principales sociedades científicas y asociaciones de pacientes, como la Sociedad Española de Psiquiatría (SEP), Asociación Española de Psiquiatría del Niño y el Adolescente (AEPNyA), la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica (SEPB) o la Confederación de Salud Mental España, entre otras. La consultora Ascendo Consulting ha sido la encargada de elaborar la metodología del estudio.
La psicosis es una enfermedad mental grave que afecta al 3% de la población, lo que supone unos 1.400.000 españoles, y que suele aparecer antes de los 35 años.
Durante su intervención, el Dr. Benedicto Crespo-Facorro, Jefe de Sección, responsable del Programa Asistencial para las Fases Iniciales de Psicosis (PAFIP) del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, coordinador del programa de esquizofrenia de CIBER de Salud Mental (CIBERSAM) y coordinador del Libro Blanco, ha explicado: “Para mejorar el pronóstico de las psicosis es fundamental la detección y el tratamiento temprano”. “Es una evidencia que los tratamientos precoces, intensivos, específicos y multiprofesionales mejoran el pronóstico de la enfermedad y la calidad de vida de los pacientes y de sus familias”.