Redacción, 24-03-2014.- Cada año nacen en España alrededor de quinientos niños con una deficiencia auditiva de grado profundo. La más vanguardista tecnología, los implantes cocleares, ha venido a solucionar este problema de envergadura. Estos complejos dispositivos son capaces de restablecer la audición transformando señales acústicas en señales eléctricas que estimulan el nervio auditivo.
No debemos olvidar que la pérdida auditiva es una de las patologías más frecuentes en los recién nacidos, cinco de cada mil bebés tienen algún trastorno de este tipo. Así que para evitar que esto influya en el desarrollo intelectual, psicológico y social de los menores estas patologías deben solucionarse lo antes posible.
Afortunadamente, hay especialistas que mantienen su entusiasmo en el devenir del tiempo, como es el caso del Dr. Manuel Manrique, del Departamento de Otorrinolaringología de la CUN, quien, entre otros, ha conseguido que España haya sido uno de los países que antes ha implantado todos los programas de detección precoz de hipoacusia infantil. Y por eso nos dijo que “hoy en día todos los niños que nacen en la mayor parte de los hospitales españoles son estudiados a través de pruebas concretas que nos permiten detectar si oyen bien o no en sus tres primeros días de vida”.
En definitiva, encontrar una solución temprana es imprescindible para evitar, además, retrasos y problemas en el habla. Por eso, la media de edad de implantes cocleares se sitúa en los quince meses.
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