Redacción, 02-03-2015.- Aunque se necesitan más estudios, investigadores están trabajando en una nueva vía para tratar la hiperplasia benigna de próstata. Por el momento, los resultados han sido muy buenos, y todo parece indicar que ofrece menos riesgo, menos dolor y menos tiempo de recuperación que la cirugía tradicional.
Mediante el uso de un tratamiento de radiología intervencionista conocido como embolización de la arteria de próstata (PAE, por sus siglas en inglés), los médicos fueron capaces de mejorar los síntomas de los hombres con hiperplasia benigna de próstata (HBP), independientemente del tamaño de la HBP antes del tratamiento, según los resultados de un estudio retrospectivo.
La HBP, una condición en la que se agranda la próstata, pero no es cancerosa, tienen una nueva opción de tratamiento menos invasiva y con menos complicaciones que otros tratamientos mínimamente invasivos, como la resección transuretral de la próstata y la cirugía, según la investigación que se presenta en la reunión científica anual de la Sociedad de Radiología Intervencionista.
«A medida que la atención sanitaria se mueve hacia una atención más centrada en el paciente, es fundamental que los radiólogos intervencionistas, en colaboración con los urólogos, sean capaces de proporcionar a los pacientes con HBP un procedimiento ambulatorio sin dolor», afirma Sandeep Bagla, investigador principal del estudio y radiólogo intervencionista en el Hospital Inova Alexandria, en Virginia, Estados Unidos.
«Este tratamiento ofrece menos riesgo, menos dolor y menos tiempo de recuperación que la cirugía tradicional y tenemos la esperanza de que una mayor investigación confirmará si es una terapia efectiva para la HPB», agrega este experto, quien examinó junto con su equipo los casos de 78 pacientes que se sometieron a la embolización de la arteria prostática para la HPB, como parte de la práctica habitual de los clínicos