Redacción, 09-08-2014.- Los bebés nacen con un ‘kit’ básico de habilidades físicas que su desarrollo ampliará en los primeros meses y años de vida, entre ellas su capacidad para adaptarse a la temperatura exterior. En el verano las altas temperaturas ponen a prueba estos sistemas de adaptación, sobre todo si tenemos en cuenta que en muchos de ellos la actividad física es inherente a sus juegos.
Según señalan desde el sitio web ‘Healthychildren.org’ (www.healthychildren.org), el portal en Internet dirigido a los padres de la Academia Americana de Pediatría , existen demasiados casos de jóvenes que han sufrido golpes de calor con consecuencias fatales mientras practicaban deporte de competición.
Las combinaciones más peligrosas a menudo implican elevados niveles de humedad y calor, aunque pueden producirse problemas similares en climas no tan drásticos derivados de esta baja tolerancia al calor en los menores, señalan los pediatras estadounidenses .