Redacción, 10-12-2014.- Desempeñar una actividad profesional durante la noche y, por lo tanto, dormir en horario matinal provoca que quemen menos energía durante un periodo de 24 horas que los trabajadores con un horario normal, incrementando así su riesgo de aumento de peso y obesidad, según concluye un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Colorado en Boulder, Estados Unidos.
Los investigadores han sabido que las personas que trabajan y, por lo tanto comen, durante la noche cuando sus cuerpos están preparados biológicamente para dormir son propensos a subir de peso, pero hasta ahora no estaban claras las razones.
En el nuevo estudio, publicado en ‘Proceedings of the National Academy of Sciences’ adultos sanos pasaron seis días en Centro de Investigación Clínica y Traslacional del Hospital de la Universidad de Colorado. Durante los dos primeros días, los participantes siguieron un horario normal de dormir por la noche y permanecer despierto durante el día y luego pasaron a un horario de trabajo por turnos durante tres días, inviertiendo sus rutinas.
«Cuando las personas estuvieron en un horario de trabajo por turnos, su gasto diario de energía se redujo y, a menos que disminuyeran su ingesta de alimentos, esto por sí solo podría conducir a un aumento de peso», señala Kenneth Wright, director del Laboratorio del Sueño y Cronobiología de la Universidad de Colorado y autor principal del artículo.