Redacción, 24-09-2020.- Pese a las diferencias existentes entre uno y otra, el sonambulismo y las crisis epilépticas frontales nocturnas pueden ser confundidas con mucha facilidad porque ambas conllevan manifestaciones y comportamientos anormales durante el sueño con un componente motor muy importante.
“Para cualquier persona que asiste a una crisis epiléptica de un paciente puede ser difícil no identificar esta crisis como sonambulismo, ya que al final el sonambulismo es algo mucho más conocido”, ha explicado el doctor Juan José Poza, neurólogo del Hospital Universitario de San Sebastián, que ha reconocido que por ese mismo motivo “muchas veces” es difícil obtener un diagnóstico por la descripción del episodio que hacen los pacientes y sus familiares.
Tal y como recoge la Sociedad Española de Sueño (SES), durante su ponencia Sonambulismo vs epilepsia en adultos y niños, enmarcada dentro del programa de la XXVIII Reunión Anual de la SES, que se celebra estos días en formato virtual, Poza ha señalado que “la manera ideal” para obtener un diagnóstico es tener un registro mediante la monitorización del sueño con Video-Electroencefalografía (video-EEG) en el Hospital, pero ha matizado que esto es “difícil” porque el paciente puede quedarse a dormir en el Hospital para la monitorización y no presentar ningún episodio durante esa noche concreta.
“Hoy que todos llevamos una cámara de vídeo encima en nuestros smartphones, tener un registro en vídeo del episodio (y si son más, mejor) es fundamental. Poder ver el tipo de movimiento del paciente, su actitud, cómo y cuándo se inicia el cuadro, la duración del mismo y las estereotipias nos puede ayudar mucho a los profesionales en sueño para el diagnóstico”, ha señalado el neurólogo.