Redacción, 11-07-2023.- Los expertos alertan de que, con el auge de intolerancias alimentarias, la población general puede confundir los síntomas, porque en ocasiones son similares.
Alergia, intolerancia o sensibilidad. Cada vez es más común escuchar a la gente decir que tiene alergia a los frutos secos, intolerancia a una proteína o una sensibilidad a un alimento en concreto. ¿Qué diferencia hay entre los tres términos?
La alergia alimentaria, especifica Beatriz Lardiés, endocrino del hospital Miguel Servet de Zaragoza, «se genera como consecuencia de una respuesta específica anómala del sistema inmune tras la exposición oral, cutánea o inhalada, generalmente repetida, a un determinado alimento». Entre los principales síntomas están: congestión nasal, rinorrea (aumento de mucosidad nasal), estornudos, lagrimeo y enrojecimiento de los ojos, tos seca o dificultad respiratoria, entre otros.
Tal y como recoge Heraldo, por su parte, «la intolerancia alimentaria es una reacción adversa que presenta un individuo tras la ingestión de un alimento o aditivo alimentario producida por un mecanismo no inmunológico», explica. Diarrea, hinchazón, flatulencia, ardor de estómago, calambres abdominales, erupciones cutáneas, mareos y dolores de cabeza son los síntomas más comunes.