Redacción, 17-05-2022.- El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SIDS) se atribuye como la causa de un fallecimiento cuando la muerte de un niño menor de un año permanece sin explicación después de una investigación exhaustiva que contempla la realización de una autopsia completa, el examen de la escena de la muerte y la revisión de la historia clínica. La Dra. María Valverde Gómez, cardióloga especialista en enfermedades cardíacas hereditarias de Health in Code, sostiene que “la evidencia disponible sugiere que el SIDS es el resultado de una combinación de condiciones biológicas, genéticas y ambientales. Muchas de estas condiciones genéticas afectan al corazón y al sistema nervioso, pudiendo ser heredadas o generadas “de novo” en el sujeto que sufre el evento”.
Tal y como recoge Healthincode, el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante afecta aproximadamente a uno de cada 1.000 nacimientos. “Aunque es raro, supone una de las causas principales de mortalidad en los niños durante el primer año en España y en el mundo desarrollado”, declara esta especialista. Cabe destacar que la tasa de SIDS disminuyó de manera significativa en la década de los 90 tras implementarse las medidas de las sociedades de pediatría sobre el sueño seguro en niños.
Los test genéticos, recomendados por las guías de prevención
Los estudios genéticos contribuyen a identificar las causas genéticas que convierten a estos lactantes en más vulnerables e incluso, en los casos en los que desafortunadamente el evento diagnóstico es el fallecimiento de un bebé, permite identificar la causa, así como riesgo ante un segundo evento. “En alrededor de un 20% de los casos de SIDS se identifica una mutación causal. Este porcentaje, similar al del conjunto de muerte súbita inexplicada del adulto, evidencia la importancia del estudio genético en estos casos tanto en niños como en adultos, según lo reflejan también las guías de prevención de muerte súbita”, asevera el Dr. Juan Pablo Ochoa, director de Cardiología de Health in Code.