Redacción, 29-12-2024.- La combinación de comidas copiosas con restricciones de alimentos al día siguiente o ayuno prolongado para compensar los excesos, supone en muchas personas un grave riesgo para salud y resulta muy perjudicial, sobre todo en pacientes con ansiedad, desequilibrio emocional o en riesgo de malnutrición, entre otros, según ha indicado Lourdes de la Bastida, nutricionista del Hospital Quirónsalud Córdoba.
Lourdes de la Bastida ha explicado que en estos días de Navidad es habitual consumir platos más elaborados y no por ello deben hacerse restricciones, así que «si algunos días realizamos comidas más abundantes no hay que alarmarse, lo mejor es retomar la alimentación habitual y no hacer compensaciones. La alimentación debe realizarse con moderación, utilizando el sentido común, ya que ningún extremo es bueno, y comer un día por encima de nuestras necesidades y otro día nada para equilibrar, perjudica gravemente la salud».
Es positivo afrontar las fiestas con una mentalidad equilibrada, sin castigarse por tomar platos especiales, ya que lo importante es seguir una dieta sana y proporcionada en el día a día, y buscar mantener la armonía nutricional, según recoge Quirónsalud.
Lo importante es seguir un patrón de alimentación «lo más saludable posible y con sentido común, disfrutar del momento comiendo despacio, masticando bien, saboreando los alimentos y disfrutando de la compañía», ha señalado.
En principio, no debe eliminarse por completo ningún alimento, salvo que haya alguna patología en la que esté contraindicado, ha subrayado la nutricionista. Durante estas fechas hay más tendencia a consumir productos como embutidos, y otros con mayor contenido de azúcar como polvorones, turrones y chocolates, y siempre que su consumo sea de forma puntual y no con frecuencia, «no hay que preocuparse».