Redacción, 20-03-2022.- Actualmente el número de embriones transferidos oscila entre tres —normalmente transferidos dos o tres días después de la FIV — y uno solo — en este caso se suele transferir cinco días después de la FIV, tras realizarle a los embriones un diagnóstico genético preimplantacional— .
Dado que esta decisión depende muchas veces, según algunos profesionales de la medicina reproductiva, de la costumbre de cada clínica, más bien que del análisis profundo y personalizado de cada caso, se siguen produciendo muchos errores.
Cierto es, que la desventaja de la transferencia de dos o tres embriones a la vez, es un gran riesgo de un embarazo múltiple. Por ello, y con este argumento se impuso en la reproducción asistida la idea de la transferencia de un solo embrión — SET, del inglés “single embryo transfer”— . Sin embargo, está demostrado que esta estrategia disminuye la probabilidad de embarazo, porque muchos embriones, aún viables tres días después de la FIV, no siguen creciendo hasta el quinto día.
Ante este dilema: ¿Cuántos embriones es aconsejable transferir en una FIV?
Tal y como recoge La Razón, la elección entre las dos opciones, la transferencia de varios embriones o de un solo embrión, se tiene que hacer según las características particulares, incluyendo la edad de la mujer y su reserva ovárica, la calidad de los espermatozoides de su pareja, el número y la calidad morfológica de los óvulos fecundados, sin olvidar la preferencia subjetiva de la pareja. Por ejemplo, más embriones se tendrían que transferir cuando el número de los óvulos fecundados es bajo o hay problemas de la calidad de espermatozoides.
Por otro lado, en parejas jóvenes y con números elevados de los óvulos fecundados la transferencia de un solo embrión no sería una mala decisión.
Entre otros motivos, porque la mayoría de embriones obtenidos en estos casos no presentan anomalías, por lo que con un solo embrión ya hay un alto porcentaje éxito de embarazo.