Redacción, 07-03-2025.- La obesidad es una enfermedad compleja y multifactorial donde la salud mental de la persona que la padece juega un papel fundamental. Con motivo del Día Mundial de la Obesidad, que se celebrará mañana 4 de marzo, la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO), la Asociación Nacional de Personas que viven con Obesidad (ANPO) y Novo Nordisk se han sumado al lema “Changing Systems. Healthier Lives”, de la Federación Mundial de Obesidad, para invitar a reflexionar sobre cómo los diferentes sistemas pueden ayudar a mejorar el abordaje de la enfermedad, con especial foco en el entorno directo del paciente y la sociedad.
La obesidad y la salud mental están estrechamente relacionadas: mientras que una inadecuada salud mental puede influir en el desarrollo de la obesidad, esta también puede desencadenar o agravar trastornos emocionales como la ansiedad y la depresión.
De hecho, la obesidad incrementa en un 30% el riesgo de desarrollar un trastorno de ansiedad y en un 40% síntomas de ansiedad. Según otro trabajo, las personas con obesidad tienen un 55% más de riesgo de desarrollar depresión con el tiempo, y las personas con depresión tienen un 58% más de riesgo de tener obesidad.
Por tanto, abordar la obesidad sin atender a los factores emocionales y psicológicos es tratar solo una parte de la enfermedad. Los expertos destacan que un enfoque integral que contemple tanto la mente como el cuerpo es esencial para conseguir resultados sostenibles y mejorar la salud cardiovascular de los pacientes.