Redacción, 29-06-2023.- Si preguntáramos a diferentes pacientes las razones por las que desean mejorar su cara y someterse a un tratamiento de rejuvenecimiento facial, las respuestas serían muy diversas. El cansancio y la falta de cuidados o hábitos saludables es la principal causa entre aquellos más jóvenes. Para los de mayor edad son los cambios ponderales, las enfermedades o el propio envejecimiento las causas.
Tal y como recoge el Hospital Nuestra Señora del Rosario, así lo asegura la Dra. Carmen Iglesias Urraca, responsable del Servicio de Cirugía Plástica y Medicina Estética del Hospital Universitario Nuestra Señora del Rosario:
“En cualquiera de los casos, las preguntas que debemos hacernos a continuación son cuál es nuestro objetivo, hasta dónde queremos llegar y con qué medios, médicos o quirúrgicos. Es importante entender que determinados resultados solo se pueden conseguir con las cirugías, aunque gracias a la tecnología, que permite las técnicas no invasivas, se pueden conseguir buenos resultados”.
¿Por dónde empezar?
Según la especialista, la primera de las necesidades es mejorar la calidad de la piel para borrar las imperfecciones, las cicatrices y darle un aspecto luminoso.
“En este caso, la tecnología láser, los peeling y la mesoterapia nos pueden ayudar”, aconseja.
Devolver a la mirada un aspecto fresco se puede lograr con botox, mientras que para las personas con pesadez en los párpados por exceso de piel o bolsas, puede ser necesaria la blefaroplastia, tal y como recoge el HNRS.