Redacción, 12-07-2021.- Con la llegada del verano y las vacaciones estivales se suelen producir cambios en los hábitos diarios que pueden llevar aparejado un consumo excesivo tanto de bebidas alcohólicas como de comida, algo que este año, además, se puede incrementar con el fin del Estado de Alarma y las restricciones al ocio.
La cardióloga del Hospital Quirónsalud Cáceres y experta en arritmología, Rosa Porro Fernández, ha querido advertir sobre los peligros del «síndrome del corazón festivo» consistente en una arritmia provocada por un exceso en el consumo de alcohol en un breve espacio de tiempo y que incluso puede afectar a personas que no cuentan con ninguna patología previa de carácter cardiaco.
Según ha explicado la doctora, este síndrome es una fibrilación auricular que consiste en «un trastorno del ritmo del corazón, que provoca la pérdida de sincronía del latido normal, ya que el impulso eléctrico del corazón no es regular».
Mientras que durante un ritmo normal las aurículas y los ventrículos se contraen de forma rítmica y coordinada, añade la cardióloga, la fibrilación auricular provoca una arritmia que nace de las aurículas, mandando señales eléctricas «desorganizadas, muy rápidas e irregulares».
Palpitaciones, sudoración o cansancio
La doctora Porro Fernández nos recuerda que muchas de las personas con esta arritmia no tienen ninguna sintomatología, pero que los que los padecen suelen notar «pulso irregular y palpitaciones». Además, hay síntomas más difusos como «la sensación de cansancio o fatiga, sudoración, dificultad para respirar o mareo». Asimismo, ha reiterado que este trastorno cardiaco es frecuente durante los meses de verano, en los que se tiende a los excesos, por esta razón ha incidido en que la fibrilación auricular puede «ocurrir también en un corazón aparentemente sano». Es la arritmia supraventicular más frecuente y por eso no es difícil de que se padezca entre población sana y también en gente joven.